Con las fregonas como bandera de lucha

Las trabajadoras domésticas y de cuidados reclaman #NoalaEnmienda6777.   En el año 2011 las empleadas domésticas le arrancaron al Gobierno un compromiso para introducirlas en el régimen general de la Seguridad Social. Pactaron la equiparación de cotizaciones hacia el 1º de enero de 2019. Sin embargo, el PP modificó la fecha con la enmienda 6777 a los Presupuestos Generales del Estado. Se trata del presupuesto que Pedro Sánchez (PSOE) y Pablo Iglesias (Podemos) heredaron de M.Rajoy; y aceptaron “comerse con patatas” como señal de “estabilidad” hacia la Unión Europea.

El nuevo límite se estableció para el 1º de enero de 2024. Se extendió cinco años el plazo para que las trabajadoras domésticas obtengan más derechos. El grupo de los Populares declaró que lo hizo para “evitar una serie de efectos negativos”, como “la generación de nuevas obligaciones para los empleadores del hogar”. Las trabajadoras no les interesan.

Se extendió cinco años el plazo para que las trabajadoras domésticas obtengan más derechos.

Ellas ya no pueden esperar, por eso se rebelaron en Madrid, Bilbao, Valencia, Pamplona, Sevilla y Granada. Quieren un convenio colectivo, subsidio por desempleo y equiparación al resto de las trabajadoras. A la par es necesario que se ratifiquen urgentemente el Convenio 189 de la OIT y la Recomendación 201, sobre el trabajo decente en el ámbito doméstico. Las directamente afectadas, componen un universo cercano a las 600 mil personas, el 96% son mujeres. Un tercio no está dado de alta y es imposible cuantificar a las hermanas inmigrantes.
Las compañeras se desloman limpiando casas, atendiendo personas mayores, niños o discapacitados. Habitualmente sin contrato, con salarios miserables y descansos mínimos. No tienen tiempo ni para desarrollar su vida social. Además, y más allá de las excepciones, la discriminación al extranjero existe. Cada vez que levantan un poco la cabeza “les recuerdan” que “deberían estar agradecidas” por el trabajo que les dan.

Apuntad explotadores y gobernantes: no tenéis espacio para invisibilizar la opresión. Resolvedlo, ya mismo. Las mujeres no se callarán, ni dejarán de exigir sus derechos.

Desde el 8M ha cobrado más fuerza la consigna “Sin nosotras no se mueve el mundo”. Las fregonas se transformaron en símbolos de lucha. La Coordinadora de la Huelga Feminista ya se dedica al objetivo de garantizar que las mujeres de cuidados puedan participar libremente de la próxima huelga.
Apuntad explotadores y gobernantes: no tenéis espacio para invisibilizar la opresión. Resolvedlo, ya mismo. Las mujeres no se callarán, ni dejarán de exigir sus derechos. Desde Juntas y a la Izquierda decimos: No a la Enmienda, abajo el presupuesto de M.Rajoy y que el capitalismo y el patriarcado caigan juntos.