A guanyar els carrers pel salari i els drets obrers

Solidaritat amb el poble kazakh. Solidaritat amb el poble kazakh. Solidaritat amb el poble kazakh.

La pérdida media de poder adquisitivo de los trabajadores se profundiza. La suba de precios es generalizada. Se siente cada día en el bolsillo de las familias obreras y humildes.

Más gastos, menos ingresos

La inflación de diciembre fue del 6.7%. La actualización de los convenios quedó en 1.47%, es decir cinco puntos por debajo. Según los datos del ministerio de Trabajo, només “se firmaron incrementos en 2.886 convenios que afectaban a cerca de 8 millones de trabajadores con la citada alza media anual del 1,47%”. Para el resto de los trabajadores, ni siquiera hubo incrementos miserables.

Convenios caducados

Es la subida salarial más baja de los últimos cuatro años justamente en el momento en que la inflación se ubica en niveles récord para los últimos treinta años. Es evidente que los convenios negociados en la primera mitad del año, con menos inflación, quedaron totalmente desactualizados, lo que provoca una pérdida del poder adquisitivo y la expansión de la desigualdad social.

De progresistas, nada

Esto sucede con el gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos, autodefinido como “el más progresista de la historia”. No es casualidad. Es producto de la respuesta que le dan a la crisis capitalista y del Covid-19. Responden a las órdenes de Bruselas y planifican las ayudas de la UE en función de los intereses de las grandes empresas y los bancos. Es una necesidad acuciante construir una nueva alternativa política de izquierda y anticapitalista, con los socialistas revolucionarios en primera línea.

Derogació de la reforma laboral, tampoc

El saqueo al bolsillo se complementa con la continuidad de los aspectos más lesivos de la reforma laboral de Rajoy y el PP. Las reformas planteadas como históricas son un maquillaje que no altera en absoluto la matriz de funcionamiento del sistema capitalista que privilegia las ganancias empresariales sobre las vidas de los trabajadores.

Para derrotar a la burocracia, hacen falta nuevos dirigentes sindicales

Y tiene cómplices, los dirigentes sindicales enquistados en las centrales mayoritarias de CC. I. i UGT. Son estos burócratas los que negocian todo a la baja con las patronales y el gobierno. Los que permiten la pérdida de conquistas históricas, el trabajo precarizado, los contratos basura, los salarios bajos, los despidos y toda clase de abusos. Encima acordaron con las patronales y el gobierno la última reforma, que no implicó cambios cualitativos en la vida laboral. Mientras la situación empeora, los burócratas sólo hacen declaraciones más o menos críticas, pero es sólo para quedar bien parados y presionar un poco. Nada más. Se cuidan como del Covid-19 de llamar a una lucha franca por los intereses obreros. Hacen falta nuevos dirigentes que pasen por encima a los que maniobran y traicionan. Que sean democráticos, que impulsen asambleas para debatir y decidir todo. Que apoyen e impulsen las luchas y se jueguen por la coordinación, por la unidad para hacerlas más fuertes.

Hay que nacionalizar las empresas de energía

El presidente Pedro Sánchez dijo en una entrevista en la SER que hay que evitar que el alza del IPC “acabe impregnando al resto de la economía, como los salarios…” segons Sánchez, hay que sentarse a esperar que baje la energía. és a dir, que se sigan enriqueciendo las empresas privadas, mientras las grandes mayorías tienen dificultades para llegar a fin de mes. Si el aumento de la luz es el problema, que lo prohíban por ley y que nacionalicen las empresas, colocándolas bajo control obrero.

Con controles de precios, sin IVA

Que establezcan controles de precios, multas y castigos a las grandes cadenas comerciales, a todos los que aumenten y eliminen el IVA sobre los bienes de primera necesidad. Sería lo mínimo que se tendría que plantear un gobierno realmente progresista. Pero el gobierno burgués PSOE-Unidas Podemos, no se plantea estas cuestiones. Ni por asomo.

Huelga general y movilización

avui, más que nunca es necesario debatir en las empresas, oficines, col·legis, hospitales y todos los lugares de trabajo un plan de lucha en el camino de una huelga general. Con un programa por el salario, con clausulas gatillo de aumento con acuerdo al índice inflacionario, por la anulación de la reforma laboral y por la agenda propia que decidan los trabajadores. Contra los despidos y la precariedad de los contratos,

Todos con los obreros del Metal

En Cádiz hicieron vaga, barricadas y movilizaciones para defender sus derechos. Y no fueron para atrás ni con la represión ni con la persecución desatada contra ellos. Vienen de movilizarse y de enfrentarse nuevamente con la policía, cuando quiso impedirles cortar el puente de la Constitución de 1812. I el 15 de enero diversos sindicatos saldrán a la calle en Cadis, Madrid y Zaragoza contra la represión en Cádiz. ¡Hay que apoyarlos! ¡Toda nuestra solidaridad con los que luchan!