Imparables

Millones de mujeres ganamos las calles. Sigamos juntas y organizadas. Lucha y reflexión son inseparables.  El 8M las mujeres del Estado español volvimos a estar a la vanguardia de Europa. Hicimos huelga laboral, estudiantil, de cuidados y consumos, piquetes, carteles, charlas y actividades culturales; la sociedad se tiñó de color lila. Fue una jornada impresionante, la culminación exitosa de múltiples acciones preparatorias. Estamos felices de haber compartido experiencias con compañeras, amigas y simpatizantes de Juntas y a la Izquierda en Murcia, Barcelona y Madrid, tenemos por delante un largo camino de lucha unitaria contra el machismo patriarcal. Mientras lo recorremos, te invitamos a intercambiar opiniones sobre algunas reflexiones.

Asoman la cabeza. El machismo patriarcal se mostró sin ambigüedades, como habitualmente lo hace la Iglesia Católica; en primer lugar, VOX. La agrupación de ultraderecha se envalentonó a partir de Andalucía y planteó eliminar derechos conquistados. Un autocar de Hazte Oir con la cara de Hitler recorrió ciudades españolas. El líder del PP Pablo Casado rechazó la participación en la movilización, reiterando su intención de anular el aborto legal y otros derechos. También se expresó el feminismo liberal de Inés Arrimadas, Ciudadanos, el otro componente del tridente de derecha. El gobierno del PSOE sólo hace promesas y toma medidas limitadas. ¿Has reflexionado en lo que implica que el machismo patriarcal ostente la exclusividad de hacer política y decidir en tú nombre? ¿Te has planteado intervenir activamente en la política partidaria?

Protagonistas de lo nuevo. ¿Te has preguntado qué relación hay entre tu voluntad individual de lucha y la de millones de mujeres? A partir de la crisis mundial de 2008 el capitalismo ha agravado las violencias. Aplica una ofensiva contra los derechos de las mujeres: más feminización de la pobreza, planes de precarización laboral o de subir la edad jubilatoria, recortes al derecho al aborto y la educación sexual, desprotección ante la violencia de género y los femicidios, entre otros. El feminismo ha respondido haciendo algo nuevo. Cada una y todas, protagonizamos un novedoso fenómeno político y social: la cuarta ola feminista mundial que tiene características diferentes a las tres oleadas anteriores.

Masividad y combatividad. Con mayor o menor intensidad, con más represión o libertad, son millones las mujeres que protestan, sin importar su edad ni condición social. Lo hacen en forma organizada o individual, con amigas o familiares, con sus compañeras/os de trabajo, de estudio o de barrio. Como sea, participan de acciones gigantes y tenaces. Y se van abriendo camino en dónde aún no llegaron a un este estadio de lucha masiva.

Internacionalismo. En este sistema capitalista y patriarcal global, los reclamos no difieren mucho: basta de femicidios y violencia, aborto legal, alto a la trata y la explotación sexual, igualdad salarial, reconocimiento y valorización del trabajo doméstico, paridad en todos los planos. Hay un sentimiento que se corporiza: “Si tocan a una, tocan a todas”, se encuentren en el continente que se encuentren.

Cada hecho protagonizado por los colectivos de mujeres en algún lugar del mundo retroalimenta a los movimientos que se despliegan en otros, a veces muy lejanos. Las redes sociales y los medios de comunicación masiva contribuyen a la difusión, la influencia mutua y la reproducción de las iniciativas. La nueva ola feminista se nutre, crece y madura en una interacción que es internacionalista.

Relaciones. La lucha feminista se interrelaciona con las demandas de otros sectores sociales, como la clase trabajadora ocupada y desocupada, lxs migrantes y refugiadxs, la diversidad sexual, los que trabajan en el campo o los movimientos ambientalistas, democráticos y de derechos humanos. Esta apertura y sensibilidad del movimiento de mujeres está ligada a dos factores confluyentes. Se enfrenta a un mismo enemigo: los gobiernos de turno, las instituciones del régimen y en última instancia el Estado. Y, por otro lado, hay mejores condiciones para la comprensión de que tales problemas tendrán una salida efectiva en tanto y en cuanto se logren transformaciones estructurales, sistémicas.

Dinámica y conciencia. Las demandas se visibilizan en espacios simbólicos e institucionales. La acción hace avanzar la conciencia, tanto individual como colectiva. Así lo expresaba la antropóloga mexicana Marcela Lagarde: “El cambio en la conciencia que resulta de tener explicaciones diferentes -de género o feministas- constituye una verdadera conversión de las mujeres, y se define por una ruptura en su concepción del mundo y de sí mismas que marca un hito en sus vidas. Se trata de una conversión porque, después de esta sacudida de la conciencia y de la autoidentidad, resulta imposible volver a mirar la vida como antes y seguir siendo las mismas. Es una conversión, porque sucede en torno a creencias caducas y nuevas sobre cada una, las otras, los hombres, y el sentido de la vida.”

La dinámica contra el machismo institucional adquiere un carácter democrático-revolucionario y antisistema. Por la misma razón, una extendida vanguardia -en especial entre la juventud- tiene cada vez mayor conciencia de que para el 99% de las mujeres el enemigo de fondo a enfrentar y derrotar es el sistema capitalista y patriarcal. La cuarta ola configura un empoderamiento feminista doblemente radicalizado: en su accionar y en su direccionalidad política.

8Mx365D: sobran motivos para seguir luchando. “Todos mis días son 8M, porque nuestros derechos, anhelos y reivindicaciones existen los 365 días del año.” La frase expresa una necesidad: pensar cómo seguir la pelea organizadas e intercambiar opiniones para lograrlo. Por eso te invitamos a participar de nuestras reuniones, charlas y a escribirnos tu punto de vista.
Todas salimos del Día Internacional de la Mujer Trabajadora más abiertas al debate, con más fuerza y entusiasmo. Estamos convencidas que es fundamental aprovechar lo positivo para canalizarlo en organización cotidiana con Juntas y a la Izquierda, que forma parte de SOL y Anticapitalistas en Red.