Ante las declaraciones de Naim Darrechi: La violencia de género no debe ser normalizada

Las nefastas declaraciones de Naim Darrechi, se amparan en los desastres educativos, culturales y sociales del capitalismo y sus gobiernos.

Naim Darrechi tiene 19 años, es de Palma de Mallorca y es el tiktoker con mayor cantidad de seguidores en España (más de 26 millones de seguidores solo en dicha red social). El pasado fin de semana concedió una entrevista a Mostopapi en la que declaró: “Me gusta acabar dentro, esa es la verdad (…) yo no puedo con condón, nunca lo utilizo, hasta que un día dije, tío, es raro que nunca haya dejado a una chica embarazada, tantos años, así que voy a empezar acabar dentro siempre, sin ningún tipo de problema, y nunca ha pasado nada”, afirma Darrechi. Mostopapi, que se ríe de la ocurrencia, le pregunta: “¿Y ellas nunca te dicen nada en plan: ey, bro…?”. “Sí, pero bueno, yo les digo que tranquilas, que soy estéril. Tú tranquila que yo me he operado para no tener hijos”, explicó entre risas cómplices.

El entrevistador continuó escuchando la narración entre risas, como si hubiera un nefasto “pacto de caballeros” ante la morbosidad. Aunque luego Darrechi se disculpó, vale recordar que hace algún tiempo fue denunciado por su expareja por violencia y maltrato, y para salir a justificarse declaró «Te rompí un móvil, es verdad. Te habré empujado como todas las parejas, pero no te he puesto la mano encima». Y que también se manifestó contrario al aborto legal público y gratuito como un derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo, diciendo: A mí nadie me va a decir que un aborto no es quitar una vida. Yo puedo entrar a tu casa y poner el gas y quitarte la vida sin que sufras realmente. A mí me van a caer 30 años por asesinato y alguien que aborta, que se supone que es el mismo hecho, no solo es gratis sino que lo pagamos nosotros de nuestros impuestos»

Los recientes dichos machistas se viralizaron en Twitter y demás redes sociales, provocando todo tipo de reacciones por la apología al abuso sexual y a la violación. Darrechi fue tildado de: “nefasto, irresponsable, misógino, niñato” y otros adjetivos que tienen sabor a poco porque se percibe la terrible realidad de la normalización de la violencia de género. Como ya es costumbre, los reaccionarios aprovechan estas barbaridades para criminalizar a toda la juventud. No es de extrañar, hacen lo mismo con la quinta ola de contagios de Covid-19 en lugar de señalar a los verdaderos responsables de tomar decisiones erróneas y recortar en salud, que son los funcionarios del gobierno y de las instituciones que deciden sobre la vida de millones de personas. Sin dejar de señalar que las confesiones emitidas por YouTube fueron una apología a la cultura de la violación, hay que buscar las causas de fondo por las cuales en el sistema capitalista se normaliza la violencia de género.

En un país donde el 14% de las jóvenes de entre 14 a 20 años afirma haberse sentido presionada para actividades de tipo sexual, presión realizada en casi todos los casos (97,4%) por un hombre, que suelen provenir del chico con el que salen en un 55,7% de los casos, hacer este tipo de apología es una muestra más de la enorme necesidad y urgencia para aplicar una ley de educación sexual efectiva a nivel nacional. No podemos permitirnos normalizar este tipo de discursos y menos que menos las expresiones políticas que quieren acallar las voces de quienes peleamos por la igualdad y la libertad de género como Vox con la implantación de su pin parental o su dirigente Santiago Abascal afirmando que “en algunos centros educativos se enseñan “juegos eróticos” que están cerca de la corrupción de los menores”.

El Estado español se ubica en el último lugar de la UE en Educación Sexual. En una sociedad en la que seis de cada diez menores declaran haber accedido a contenidos pornográficos de algún tipo y en la que internet y las redes sociales son los medios infantiles y juveniles más influyentes acerca de la sexualidad, parece mentira que aún se siga debatiendo si es necesario que se imparta Educación sexual en el aula. La Ley Celaá recoge la educación sexual  como una materia transversal, tanto para Primaria como para Secundaria, pero a día de hoy aún se continúa debatiendo de qué forma se implementará. Si bien la educación afectivo sexual está plasmada en la Ley en los arts. 24, 25 y 27, aun no se han redactado los programas curriculares para implementarlo.

Y aunque el juego político al que se somete esta materia produce un vaivén constante que aleja a las competencias de lo verdaderamente importante, es urgente abordar esta asignatura pendiente que la sociedad pide a gritos. No basta sólo con llevar a conocimiento de la Fiscalía los dichos de Darrechi como ha hecho la ministra de Igualad Irene Montero, para de paso recordar que la Ley del Solo Si es Si será la garante de muchos derechos que las mujeres defendemos constantemente en las calles, es necesario que la ley de educación afectivo sexual se implemente de manera urgente. Con contenidos transversales, con docentes capacitados y presupuesto para su implementación a nivel nacional. Son necesarias  fuertes campañas educativas, reflexivas y que ante cada declaración aberrante como la de Naim la movilización en repudio se imponga como herramienta central.

Es urgente la organización con confianza en la fuerza de la lucha, no solamente de los papeles y las instituciones del régimen burgués, que Montero y Unidas Podemos se empeñan en fortalecer como furgón de cola del PSOE. Terminar con el machismo y la misoginia es una tarea con nos involucra a todes los que peleamos “por un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres.” Estos son algunos de los motivos por los cuales Juntas y a la Izquierda levanta las banderas de un feminismo anticapitalista, en camino de una sociedad sin explotación ni opresión, es decir del socialismo.