Catalunya: sigue vivo el reclamo por la República

La Diada 11S demostró que no está dicha la última palabra. El “diálogo” de Pedro Sánchez no incluye la autodeterminación ni la amnistía.

Los socios del Govern van por una autonomía retaceada. El reclamo popular va por la independencia. En todos los continentes se agudizan las tensiones, hay reclamos y rebeliones. Es urgente construir nuevas alternativas de izquierda anticapitalista. En la perspectiva de una salida de fondo.

La Diada del 11S volvió a ser una gran jornada de lucha. Fue convocada por la ANC, Òmnium Cultural, la Asociación de Municipios por la Independencia y otras organizaciones bajo el lema “Luchemos y ganemos la independencia”. El sentimiento dominante se expresaba en los carteles: “Ya basta de políticos títere. La independencia no se pide, se toma”, “Exigimos la independencia”. El reclamo por la República sigue vivo.

A pesar de la pandemia

Por la mañana se realizó un acto de ARRAN en homenaje a Gustau Muñoz, asesinado por la represión durante la transición. Las actividades continuaron en El Fossar de les Moreres, Plaza Urquinaona, Vía Laietana, Estación Francia, el Born y otros sitios de Catalunya. Todavía se transita por las restricciones y los miedos por el Covid-19. El independentismo está dividido. Así y todo, miles y miles de personas volvieron a ganar las calles con banderas esteladas. No estuvieron las 600 mil personas presentes antes de la pandemia. A pesar de ello fue una movilización masiva.

Incómodos

La jornada se desarrolló entre cuestionamientos a ERC sobre la utilidad de la “Mesa de Diálogo” con el gobierno español. Quisieron aprovecharla en función de sus propios intereses. La consejera de Presidencia, Laura Vilagrà (ERC) lo expresó diciendo: “Necesitamos ir a la mesa de negociación con toda la fuerza del pueblo de Cataluña”. No parecen haberlo logrado. El president Pere Aragonés recibió abucheos cuando se incorporó a la manifestación. Lo mismo le sucedió a  Oriol Junqueras recientemente salido de la cárcel cuando habló en el Fossar de les Moreres. No fue casualidad que los organizadores evitaran la presencia de funcionarios en la cabecera de la marcha.

Matices

Laura Borràs (JxCat), president del Parlament expresó que la “Mesa” servirá para ver “cuál es el valor de la palabra” de Pedro Sánchez y que “no les temblarán las piernas” ante el Gobierno. La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, afirmó que: “La autodeterminación no se mendiga, se ejerce”, y planteó “President, haga la independencia”. El presidente de Omnium Cultural, Jordi Cuixart, recientemente indultado, también se mostró crítico de las formaciones políticas mayoritarias.

Por arriba se mantienen los matices y divisiones, aunque sean parciales. Independientemente de ello, lo que queda claro, es que el reclamo por la libertad sigue vivo. De allí la desconfianza y los cuestionamientos a quienes dejan de lado el mandato del 1-O. De los cuales no están exentos quienes sostienen posiciones ambiguas.

Contradicción

La CUP convocó a la Izquierda Independentista a marchar desde la Plaza Urquinaona hasta la Plaza Comercial, al lado del Centro Cultural del Born. Allí se realizó un importante acto bajo el lema “Ni pactos ni renuncias, la lucha es el único camino” del cual participamos. La CUP formula críticas y llama a la lucha a partir de reivindicarse anticapitalista. Sin embargo, sostiene los acuerdos alcanzados con ERC que permitieron la investidura de Pere Aragonés y le dan estabilidad a su gestión. Cabe preguntarse ¿es posible ser consecuente sin pasar a la oposición franca e independiente del gobierno burgués? En nuestra opinión, no lo es. Es una contradicción que la CUP tendría que superar.

Tarifas, salarios, El Prat

En lo inmediato es necesario apoyar las luchas, principalmente contra los aumentos en la tarifa de la luz, por mejores salarios, condiciones laborales y pensiones. Contra la contaminación que traería aparejada el proyecto de ampliación de El Prat. Momentáneamente está suspendido. Pero no se puede descartar que sólo se trate de una circunstancia esporádica de las negociaciones. El 19 de septiembre, hay que darle un no contundente a la ampliación del aeropuerto.

Nueva alternativa política

La adaptación de Unidas Podemos al régimen del ‘ 78, plantea la necesidad y la oportunidad de poner de pie una nueva alternativa política. De izquierda, anticapitalista, de independencia de clase, que impulse y apoye las luchas. Que reagrupe a quienes buscan un nuevo camino para derrotar a la derecha y a la ultraderecha en todo el Estado español. La confluencia de los socialistas revolucionarios podría dar impulso a estos objetivos.

La realidad demuestra que no se puede depositar confianza en el gobierno de “coalición progresista” PSOE-UP encabezado por Pedro Sánchez, ni en los socios del Govern. Menos en la tramposa “Mesa de Diálogo” que están montando. Sólo se puede confiar en el pueblo movilizado y organizado, reclamando por la autodeterminación y la amnistía, reivindicando orgullosamente el 1-O.  

Rebeldía en curso

Las movilizaciones, huelgas y rebeliones que se repiten en el mundo en distintos momentos, son un indicativo de lo que se viene. Una post pandemia con más polarización y luchas. En un mundo convulsionado que los poderosos no logran controlar. Hay que dar vuelta todo para que la crisis la paguen los capitalistas y no los pueblos. Todo en el camino de que surjan nuevos dirigentes y organizaciones dispuestos a pelear por una salida de fondo: el socialismo con democracia.